Al parecer las enseñanzas recibidas para
cultivar el ahorro no fueron del todo asimiladas, pues las estadísticas dicen
que mucho menos de la mitad de las personas lo hace formalmente.
Las personas siguen sin asimilar la importancia que tiene el
ahorro y, al menos, formalmente no lo tienen como hábito, es decir, no se
recurre a la apertura de una cuenta en un banco o entidad financiera.
A pesar de esto, en esta entrega queremos advertirle que ahorrar
no es imposible, por lo que le conminamos a habituarse a ello. He aquí algunos
consejos que pueden ayudarle con relación a gastos corrientes que, a la larga,
pueden significar un ahorro considerable:
1. Gastos de transporte.
Moverse en automóvil propio todo el tiempo conlleva, aparte
del gasto de gasolina, otros como estacionamientos y desgaste de partes que, si
saca la cuenta resultan altamente perjudiciales para su bolsillo. Por eso, en
la medida de lo posible, utilice el transporte público, saque su bicicleta o
comparta el vehículo con un familiar o vecino.
2. Comidas en restaurantes.
Llevar los alimentos preparados al trabajo desde casa supone
un ahorro considerable que los especialistas estiman en 50 por ciento o más de
lo que gastaría en un restaurante. Además es más saludable.
3. Evite las compras compulsivas.
Andar por la calle y ver un artículo en una vidriera es una
tentación que algunos no pueden resistir. Si usted es de este tipo de personas,
tiene que hacer el firme propósito de desistir de ello. Evite comprar lo que no
necesita y que, lo más seguro, en poco tiempo termine arrumado en un rincón de
su closet.
Para ayudarse lleve un registro diario de todos sus gastos,
anótelo todo, por insignificante que le parezca, luego, al final de semana
súmelos y verá cuánto porcentaje representan estos gastos en su presupuesto.
4. Elimine servicios innecesarios.
Revise su presupuesto y recorte todos aquellos servicios que
realmente resultan innecesarios o que simplemente no use en la medida que
amerite mantenerlos como una erogación fija. Hablamos de televisión por cable o
satélite, servicios de streaming de video o música, telefonía, en fin, todo
aquello que simplemente no use.
5. Recorte sus salidas nocturnas.
No pocas personas terminan acabando con el sueldo de una
quincena en unas horas sólo por no haber resistido la tentación de salir con
los amigos la noche del viernes. Cambie la salida al bar por la reunión con sus
compañeros en casa de alguno del grupo. Verá que el ahorro es considerable.
6. Restrinja los antojos.
A todos nos pasa, los antojos siempre llegan y es difícil
resistirse a ellos. Un gusto de vez en cuando está bien, pero revísese si esto
es consuetudinario y compulsivo. Saque la cuenta y verá que puede llevarse un
buen susto al ver la cifra de resultado.
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